FAMOSAS ÚLTIMAS PALABRAS: “Nosotros en el PRI hemos salido victoriosos en Estados donde hemos competido contra alianzas y en ese sentido lo que me parece que es definitorio es la densidad y la representatividad de los candidatos, las fortalezas previas de los partidos”: Beatriz Paredes, presidenta nacional del PRI.
¿Y LA SOCIEDAD? El saldo de la reunión en Ciudad Juárez para revisar el tema de la seguridad fue previsible. La sociedad sigue indignada y con una escalada en su enojo. Si el presidente de la república no quiso atizar más la hoguera con preguntas incómodas, el análisis de fondo tiene que entrarle al punto más candente: ¿qué ha hecho la sociedad juarense por la seguridad? Nada, nada de nada. Sólo quejarse. Mientras la sociedad no se organice y construya un frente común contra el crimen organizado, la policía y el ejército estarán lejos de vender a las mafias. Por eso el presidente Calderón le dijo a los padres de familia que cuidarán a sus hijos. El mejor antídoto contra las bandas del crimen organizado se localiza en la familia y en la relación de ésta con el Estado.
AMLO GANO. Como eras de esperarse, el debate sobre la alianza electoral PAN-PRD en el Estado de México logró su cometido subyacente: reventar la coalición PRD-PT-Convergencia que Manuel Camacho había armado para la candidatura de Marcelo Ebrard y la exclusión de López Obrador. La respuesta del tabasqueño fue astuta: sacó al PT de la alianza mexiquense y presionó a Convergencia para apoyar al candidato lopezobradorista. Ahí tronó el esquema de Camacho contra López Obrador. Ahora ya se sabe que López Obrador va a ser candidato de sí mismo y no faltará el partido que lo apoye. Y Camacho y Ebrard se quedaron con la encuesta guardada para mejor ocasión. Ahora la jugada está en la cancha de Ebrard: ¿va a romper con López Obrador o esperará mejor para el 2018?
OTRO DAMNIFICADO. El fracaso de la alianza en el Estado de México --sobre todo porque López Obrador va a designar a otro perredista como candidato del PT-- fue el exrector Juan Ramón de la Fuente. Pero como siempre, a De la Fuente hay que andarle adivinando lo que quiere. Ya había dicho que no pero ahora sale apoyando las alianzas. En los pasillos del poder perredista se estima, sin embargo, que De la Fuente tenía su propio juego, en alianza con el PAN y el PRD de Camacho y Ebrard: ser el candidato de la alianza PAN-PRD para el gobierno del DF, porque el perredismo está preocupado porque sus candidatos capitalinos no suben y López Obrador también querrá imponer candidato en su feudo local. De nueva cuenta De la Fuente la jugó mal y se quedó chiflando en la loma.
FRACTURA PRIÍSTA. Después de la roqueseñal con la que el PRI celebró el alza de IVA con Zedillo de 10% a 15% --el 50%--, los tricolores no logran ver la suya. El IVA provocó la caída de Elba Esther Gordillo como jefa de la bancada tricolor y de ahí su expulsión del PRI fue sentencia inflexible. Luego el PAN le jugó las contras al PRI y dejó que los priístas subieran un punto al IVA de 15% a 16%. Y ahora que el PRI anunció que lo bajaría ese punto, el gobierno federal ya maniobró para que los gobernadores priístas evitaran esa baja. Así que el IVA va a servir como instrumento panista de fractura de la frágil cohesión priísta.
LOGICO. Ya apareció Genaro Góngora Pimentel, ex ministro de la Corte, como acarreado en la gira de López Obrador por el Estado de México.
ES PREGUNTA. ¿Fue Néstor de la Torre el chivo expiatorio con el cual detener una protesta de jugadores de la sección nacional de futbol que amenazaba con convertirse en el fermento de un sindicato y todo fue cosa de una fiesta con amiguitas? ¿Jugaron ayer mal los ratoncitos porque ya no habrá fiestas con muchachas y muchachos?
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